Paseos a pie
Con un clima agradable durante todo el año, pasear a pie por Portugal es una de las mejores formas de descubrir rincones que, de otro modo, nunca llegaríamos a conocer.
Por las calles de ciudades y pueblos, a través de los campos o a la orilla del mar, los paseos pueden tener puntos de salida y de destino bien definidos o, simplemente, desarrollarse libremente, por el puro placer de andar y de observar lo que se encuentra por el camino. Para orientarnos podemos utilizar mapas o seguir las marcas dejadas sobre el terreno por el paso de aquellos que lo recorrieron antes.
Photo: Ilha do Pico (Açores) ©Veraçor
Aunque también existen recorridos señalizados, con itinerarios certificados y bien definidos que ofrecen seguridad a todos los que los quieran seguir. Estos recorridos se encuentran homologados por la Federación de Campismo y Montañismo, entidad competente en este ámbito. Dependiendo de su extensión, se clasifican en Grandes Rutas, Pequeñas Rutas o Recorridos Locales. Las Grandes Rutas (GR) tienen siempre más de 30 kilómetros y algunas se extienden incluso por otros países, a través de Europa, como es el caso del Camino del Atlántico (GR-E9) que comienza en San Petersburgo en Rusia y atraviesa todo el continente. Con una extensión inferior a 30 kilómetros, las Pequeñas Rutas se circunscriben normalmente al ámbito de un municipio, mientras que los recorridos locales cubren distancias más reducidas. Caminar es, por tanto, una actividad al alcance de cualquiera, para la cual basta con seguir las señales que encontraremos sobre el terreno para no perderse.
Photo: ©Turismo Centro de Portugal
Para mayor seguridad, no se olvide de otros medios de orientación, como los mapas detallados del terreno a gran escala, realizados por el Instituto Geográfico Portugués. O la tradicional brújula y otras aplicaciones disponibles en el móvil, así como guías e itinerarios con información que complemente aquello que se observa. Podemos combinar la caminata con la búsqueda de pequeños “tesoros” practicando el geocaching con la indispensable ayuda del GPS. Elemento fundamental para todos es el tipo de ropa y de calzado, que debe ser confortable y adecuado para el clima y el terreno. Y como no siempre se puede contar con establecimientos que sirvan bebidas y comida, conviene llevar agua y algunos alimentos.
Photo: Pico do Areeiro (Madeira) ©DRT Madeira
También existe la posibilidad de participar en actividades organizadas por una empresa, siguiendo recorridos guiados por profesionales especializados, que ya han explorado el terreno. De este modo, ellos marcan el ritmo y guían el camino, indicando los puntos de interés y los detalles que esconde cada etapa. Las propuestas son muy variadas y permiten disfrutar plenamente del paseo sin preocuparnos por los aspectos prácticos, así como distribuir mejor el esfuerzo a lo largo de la caminata. De este modo, cuando llegamos al final de la jornada, tendremos más ganas de degustar la excelente gastronomía de cada región y de disfrutar de la comodidad de un establecimiento de turismo rural.
Más información en:
www.portuguesetrails.com