Angra do Heroísmo se encuentra en Terceira, la tercera isla de las Azores descubierta por los navegantes del siglo XV, y fue la primera ciudad de este archipiélago estratégicamente ubicado en el océano Atlántico.

Angra cobró importancia como enclave comercial, sirvió de escala en las rutas de navegación entre Europa y las Américas, y fue un lugar de carga y descarga de los productos de las demás islas del archipiélago y uno de los principales puntos de llegada... Y lo sigue siendo en la actualidad, gracias al aeropuerto internacional de Lajes.

Su larga historia y el patrimonio construido a lo largo de los años hicieron posible que su centro histórico fuese considerado Patrimonio de la Humanidad. Tanto la ciudad como muchas otras localidades de las Azores tienen una belleza especial como resultado del contraste entre la exuberante naturaleza y la piedra oscura de origen volcánico utilizada en las edificaciones.

Photo: Marina de Angra do Heroísmo ©Arquivo Turismo de Portugal

Utilice el mapa para orientarse durante el itinerario.

Para visitar la ciudad, sugerimos seguir un itinerario que se inicia en el puerto deportivo de Angra y sube por Rua Direita (9) hasta llegar a Praça Velha (8), un punto central de la ciudad desde el que puede partir para visitar diferentes lugares de interés. También puede seguir por Rua do Espírito Santo, si bien sus aceras estrechas le obligarán a avanzar por la vía destinada a los vehículos.

Encontrará calles en buen estado de conservación, con pavimento de piedra caliza y basalto, o con losas de basalto que le permitirán desplazarse sin dificultad. Sin embargo, existen muchas pendientes, como por ejemplo en Rua da Sé (5), que pueden dificultarle el camino, por lo que le sugerimos ir acompañado para poder superar más fácilmente algunos obstáculos.

En general, las aceras son amplias en las vías principales, al contrario de lo que sucede en las calles secundarias. Se observa una generalizada ausencia de escalones en los pasos de peatones. En la zona comercial, en donde no existen rampas de acceso a las tiendas, son frecuentes las terrazas y los automóviles aparcados sobre la acera, lo que provoca problemas para circular. Por todo ello, se aconseja utilizar el mapa que encontrará más arriba, en el que se señalan los diferentes niveles de accesibilidad en el centro histórico de Angra do Heroísmo.

Photo: Igreja da Misericórdia © Turismo dos Açores

Si empieza su recorrido por Rua Direita (9), podrá contemplar la imponente iglesia de la Misericordia (11), construida en el siglo XVIII. Se entra por una escalinata, y las sillas de ruedas no pueden acceder a todas las salas del interior, pero el pasillo central es amplio y permite disfrutar de la visita guiada. Una vez en Praça Velha (8), siga por Rua da Sé (5) para visitar la iglesia del Santísimo Salvador de Sé (4), uno de los edificios más importantes de la ciudad. La entrada es accesible, y los espacios interiores son amplios y no presentan obstáculos, lo que permite admirar el trabajo de talla dorada de los altares del Espíritu Santo y del Santo Cristo de las Misericordias. Junto a la catedral vemos el Palacio Bettencourt (3), un hermoso edificio del siglo XVIII que perteneció a un capitán general de las Azores y hoy alberga la biblioteca pública.

Regresando a Rua da Sé y siguiendo por Rua do Palácio o por Rua Direita, se observa el antiguo colegio de los Jesuitas, dividido entre el Palacio de los Capitanes Generales (6) —símbolo del poder civil regional desde el siglo XVIII y actual sede de la presidencia del Gobierno regional— y la iglesia de Nuestra Señora del Carmen (7). A la iglesia se entra por una escalinata o una rampa muy inclinada, y la circulación accesible en el interior solo es posible en el pasillo principal. En el interior destacan las tallas doradas y los paneles de azulejos del siglo XVII.

Photo: Jardim Duque de Terceira ©Turismo dos Açores

En Rua do Marquês se encuentra la entrada al Jardín Duque de Terceira (10), en donde podrá hacer una pausa para disfrutar de la naturaleza y de la vegetación autóctona. El jardín es accesible gracias a unas rampas que permiten acceder a los diferentes niveles. En lo alto de la ladera de San Francisco se encuentra el edificio de un antiguo convento que hoy alberga el Museo de Angra do Heroísmo (12). Destaca la variedad de sus fondos, relacionados con la historia de Terceira y de este archipiélago. Aunque la ladera es inclinada, la entrada es accesible y la circulación en su interior presenta solo algunos obstáculos puntuales. Se puede realizar una visita guiada adaptada para personas con necesidades especiales, y existen diferentes zonas con información en audio y vídeo sobre la exposición.

Regresando a la bahía de Angra y siguiendo junto al mar, se llega al Fuerte de São Sebastião (14), transformado en un hotel. Allí existe un mirador al que se puede acceder gracias a una rampa. El recorrido en su interior solo presenta algunos obstáculos puntuales.

En el otro extremo de la bahía podrá visitar la iglesia y el convento de San Gonzalo (2). Se trata del mayor convento de la isla, y fue el primero en construirse, ya que data de 1545. La fachada es muy sencilla, pero en su interior encontrará notables retablos en talla dorada y paneles de azulejos de los siglos XVII y XVIII que justifican la visita a pesar de la escalinata de la entrada. En el interior, los espacios son amplios, aunque existen algunos escalones. Un ascensor permite acceder a los pisos superiores. Normalmente, la visita se realiza en compañía de un profesional.

Photo: Monte Brasil, Angra do Heroísmo © Maurício Abreu | DRTA

A pocos minutos se encuentran la fortaleza y la iglesia de San Juan Bautista (1). Este edificio fue mandado construir por el rey Felipe II de España y I de Portugal a finales del siglo XVI para proteger las armadas procedentes de América que pasaban por la Azores. Se puede visitar, pero el acceso en silla de ruedas no es posible en todas las salas, y el suelo es irregular. Este monumento se encuentra en la subida al Monte Brasil, un recorrido que sugerimos realizar en un vehículo adaptado. El esfuerzo vale la pena, ya que este mirador natural brinda las más espectaculares vistas de Angra do Heroísmo.